09 de enero de 2025
A medida que envejecemos, nuestros cuerpos acumulan mutaciones genéticas, creando un mosaico de células con genomas diversos. Estas mutaciones, a menudo inofensivas, también pueden contribuir al desarrollo de cánceres y enfermedades neurológicas. Los estudios demuestran que las mutaciones aumentan con la edad, especialmente en el cerebro. Este proceso podría influir en el propio envejecimiento. Las especies más longevas acumulan mutaciones más lentamente, lo que sugiere que la acumulación de mutaciones puede acortar la esperanza de vida. De acuerdo con la autora, los investigadores están explorando maneras de ralentizar o reparar estas mutaciones, lo que podría a su vez ralentizar el envejecimiento.